sábado, 16 de octubre de 2010

Escuchar al corazón

Siempre he sido una persona sencilla, me gustaba  quedarme en casa mirando  la tele mientras  las galletas de almendras se hacían en le horno .
El olor a mantequilla , mezcladas con huevo  me daba la sensación de un placer de hogar muy difícil de poder trasmitir con la palabra, pero si con el paladar.
En casa eramos tres hermanas, yo era  la chica, por lo que me quedé en casa, ayudando a mi madre en lo que podía, hasta que me casé con un familiar muy lejano , nos enamoramos despacio, tanto qué cuando dije si quiero el contaba con 50 años de edad y yo 35 años.
No tuvimos hijos, lastima pero  tampoco lo eché mucho en falta, Eduardo no  podía, una mala enfermedad mal curada le dejó  sin poder procrear, lo supo antes de pedirme matrimonio, por eso; quizás me hizo caso, porque a el quién realmente le hacía tilín o tolón era mi prima Pili.
Pero Pili era muy joven, demasiado para él, no por edad, sino porque era muy infantil,  y justamente de ella quiero hablar.
La prima Pili era cinco años más mayor qué yo, cuando era niña se quedó sin madre,  pues una injusta enfermedad se la llevó en pocos meses , desde que se lo diagnosticaron.
La prima Pili era la pequeña de cuatro hermanos,  era una gran niña, dulce y muy buena, muy servicial, pero como decía muy infantil, porque se creía tonterías qué salían en la tele, o en la revista,  o en las novelas rosas que estaba super enganchada,
ella siempre me hablaba del amor, me decía que algún día vendría a buscarla ese hombre que estaba entierras muy lejanas pero que sabia que lo iba a conocer,
vivía en un sueño permanente.
Mi madre nos crió  juntas,  por eso para mi mi prima Pili no es una prima , sino una hermana.
pasamos una adolescencia bella, sin complicaciones, era un trabajo duro estar en el campo, siempre había algo que hacer, si  no era dar de comer a los animales, era siembra, o ordenar las vacas, limpiar, pero al final del día cenábamos todos juntos y era una bendición.
Mis hermanas, Margarita, Luisa y Yolanda, se casaron pronto, pero siempre estábamos rodeados de niños ya que la mayor tuvo cuatro, Luisa dos, y  Yolanda cinco.
En  navidad es, no dábamos a basto haciendo comidas , las más ricas por cierto.
Un día mi prima Pili, me dijo que se había enamorado,  me contó quién era él,  el hijo del carnicero del pueblo de al lado, era un apuesto joven, muy zalamero y  con ese pose de mirada perdida que a las mujeres , bueno algunas mujeres les encanta.
Se casaron a los dos meses, porque  mi prima hizo cosas que no estaban bien, pero estaba enamorada, y  accedió al mandato de Pedrito.
la boda fue bonita, a mi me dio mucha pena porque teníamos mucha unión., mi prima se fue con su marido y hasta  el nacimiento de su hijo no la volví a ver, siempre con excusas pero nunca se dejaba ver,y eso que vivíamos a 5 kilómetros, pero la distancia antes era de otra manera.
Yo se lo comentaba a nuestra madre, pero ella se encogía de hombros, porque bastante tenía con superar la
muerte de mi padre que paz descanse.
Cuando nos quitamos el luto  me casé, fue una boda discreta, pues  Eduardo no quería que Pili se enterara, cosas de la vida..




Mi sobrino  era el vivo retrato que mi prima Pili, pero cuando era feliz y joven porque cuando la vi, estaba mas vieja que yo, y más triste,  apenas hablaba, yo me arme de valor y fui a verla a la carnicería,
Cuando estuve con ella,  sus ojos se le iluminaron pero en su boca solo podía decir, haberme  avisado..
Mi prima Pili ha muerto hace unos días, todo el mundo sabía su doble vida, su dolor profundo, su maltrato, si, maltrato, yo después de una vida me acabo de enterar de que mi querida Pili era maltratada,
¿Como no me di cuenta, como no supe verlo antes?
me horroriza saber lo mucho que ha sufrido en silencio.
y lo que mas me lastima es que si pidió ayuda a Eduardo, dando una carta para mi,  pero él quería algo y ella no lo dejó por eso el guardó la carta durante años en su mesita de noche,
Hoy le tengo en cuerpo presente, mirando la póliza  de seguro, lo he encontrado, mi prima  murió hace tiempo,  desconozco de  qué, triste verdad?
Cuando he leído la carta, mi alma se ha encogido,  y tengo mucho dolor, mi sobrino  el hijo de Pili, está en paradero desconocido,  tengo casi 70 años y no tengo ni  idea de lo que es verdad en mi vida. triste.

1 comentario:

  1. Este corto relato es un homenaje a una mujer mayor que conocí hace años, los nombres están cambiado por salvarguardar su anonimato, pero la historia es real, antes habia el mismo maltrato o violencia machista pero todo se quedaba de puertas para adentro, triste verdad?

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